El Valle del Entendimiento, Fariduddin Attar

El tercer Valle, el Valle del Entendimiento



Se describe el Valle de la Aprehensión Mística o Gnosis, el Valle del Entendimiento, que no tiene principio ni fin. Aquí, cada viajero toma una ruta diferente, obtiene un entendimiento apropiado a sus cualidades y estado. Después de todo, ¿podría una hormiga o una araña andar exactamente  el mismo camino que sigue el elefante, o podría un mosquito volar más y mejor? Nadie puede conocer la vía interior de otro,  cada logro y entendimiento interno lo son en diferente forma para cada uno de nosotros: algunos lo hallan en la oración privada o en la mezquita, otros en santuarios paganos, pero cuando la Luz de la Verdad ilumina el enendimeinto, cada buscador encuentra su vía particular a seguir. Así como ahora su esencia brilla, el mundo que vio antes es como una piel de fuego que transforma en un paraíso. Uno puede ver la esencia de las cosas a través del extererior, y el sentido de separación -o la existencia como un 'ser' separado- desaparece, revelando la Unidad Divina en todos lados. Aún así muchos se han perdido en el camino. Seducidos por su propio estado, piensan que han llegado al final de la jornada y pierden el celo para continuar. Aunque pienses que te encuentras bañado de felicidad o mientras pienses que has llegado al Trono de Dios, nunca te olvides de preguntarte: '¿Todavía hay más?'. Deja que tu mente se ahogue en el mar del conocimiento. Si prefieres dormir, nunca verás al Amigo. ¡Ven! ¡Persevera en la Vía de a Verdad!


El amante que dormía


Exhausto por las lágrimas y suspiros de amor, un enamorado se fue al campo y se quedó dormido. Su amada pasó por ahí lo encontró profundamente dormido, le dejó una nota que cubrió debajo de su manto. Cuando el amante despertó su preocupación regresó, cien veces peor que antes. Su amada había escrito: 'Si eres un comerciante trabaja en el mercado. Si eres un aceta, gasta tus noches en la oración. Pero si eres un amante, enrojece de vergüeza; dormir no es para los amantes; por el día, ellos miran el viento soplar en la ventana, por la noche, obervan el creciente y el menguante de la luna. Pero tú no haces nada de esto, tu amor por mí no es verdadero. Un hombre que se queda domido antes de ser vencido por el sueño de la muerte es un hombre enamorado de sí mismo. No has entendido nada del amor, tu sueño sólo puede ser como tu ignorancia-  profundo y prolongado.

Fragmento de The Essence of Sufism, de John Baldock.

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